En este sentido, se ha determinado no establecer transformaciones en la imagen, respetando la lógica natural de construcción y buscando máxima expresividad bajo parámetros de sencillez, sugerencia y sorpresa, utilizando para ello elementos básicos en la naturaleza como son las ramas (dibujos) , los troncos de árbol (esculturas) y la tierra(campos de color).
Las imágenes resultantes, sugerentes y misteriosas, junto con la presentación en papel fotográfico Hahnemuhle «William Turnner» 310 gr, nos recuerda a otros procesos plásticos como el collage o el grabado.